Compartimos tu compromiso de que los ambientes escolares sean, para todos sus participantes, espacios de crecimiento interior, sana convivencia, felicidad, atención, compasión y regulación emocional.
Nos basamos en la racionalidad, la ciencia y el amor. Investigaciones científicas de la última década demuestran que la implementación de programas de mindfulness y autocompasión en los colegios genera grandes beneficios a estudiantes, profesores, familias, a la administración escolar y a la sociedad en general, en los siguientes dominios:
Las investigaciones demuestran incrementos significativos en los niveles de atención en los estudiantes que participaron en los entrenamientos, inclusive en tareas complejas que requieren largos períodos de concentración sostenida.
Mindfulness crea cambios en las zonas cerebrales responsables de una menor reactividad emocional y una mayor habilidad para comprometerse en trabajos escolares dispendiosos aun cuando la emociones estén activadas.
Estudiantes entrenados en compasión tienen una mayor predisposición al altruismo, a tratarse mejor a sí mismos y a reducir conductas de riesgo.
Mindfulness reduce los sentimientos de estrés, mejora la ansiedad y la incomodidad cuando los estudiantes están expuestos a situaciones sociales estresantes.
El desarrollo de la inteligencia social y emocional de los estudiantes, que promueven los aprendizajes en mindfulness y autocompasión, no solo mejora su rendimiento académico y su bienestar general, sino que, además, estamos convencidos que cultivar cualidades positivas como la compasión, la gratitud y la atención plena, conducirá a una transformación personal amplia. La promoción de estas cualidades en cada uno de ellos, en la medida que van creciendo, irá impactando también a la comunidad, ya que colocarán la empatía, el cuidado y la conexión consigo mismos y con los demás, en el centro de sus vidas y de sus interacciones.
El bienestar de los profesores es uno de los factores más importantes del programa, ya que ellos, no sólo reducirán su estrés y serán más amables, sino que también serán modelos de estas cualidades y las entretejerán en las lecciones de clase y en sus interacciones con los estudiantes. De hecho, una de las claves para el éxito de los programas de aprendizaje socioemocional (SEL) en los colegios, es el grado en que los maestros y los líderes escolares entienden el valor del SEL y desarrollan su propia inteligencia social y emocional, lo que, además, aumentará su satisfacción y reducirá su estrés y el riesgo de agotamiento profesional.
Al hacer de la atención plena, la alegría y la amabilidad valores vitales palpitantes a todos los niveles de la institución educativa, se reduce el estrés y aumentan el compromiso, la coherencia institucional, la sensación de propósito, la satisfacción con el trabajo y los logros escolares.
Para que el programa de atención plena sea completamente eficaz, debe involucrar a las familias. Los padres que incorporan mindfulness como parte de sus valores y rutinas familiares, disminuyen su estrés, regulan sus emociones y se acercan mejor a la vida emocional de sus de sus hijos y sus parejas.
Dr. Ariel Alarcon
Psiquiatra, psicoanalista, instructor de mindfulness y autocompasión. Consultor empresarial, docente e investigador universitario. Escritor, autor de 5 libros y múltiples artículos científicos y de divulgación, sobre Mindfulness, autocompasión, bienestar emocional y estrés positivo.